Cada uno de nosotros como personas, o instituciones presentan un rol dentro de la sociedad. La palabra sociedad viene del latín societas que viene a significar algo así como compañerismo (la etimología se puede ver aquí). Si se quisiera definir la sociedad se pueden escribir varios libros al respecto, pero, para simplificar y seguir usando este acepción vamos a entender sociedad como la cooperación que existe entre los miembros de un grupo con la finalidad de dar continuidad en el tiempo a éste grupo. Evolutivamente la sociedad es una adaptación que la especie humana posee para sobrevivir en este planeta. Hoy en día, donde la transformación del medio natural es tan drástica, la sociedad humana posee muchas facetas, pero me interesa dar énfasis a la siguiente, el rol que tenemos dentro de la sociedad.
Para entender el rol dentro de la sociedad, se debe tener claro que uno de los objetivos de ser parte de una sociedad es para dar continuidad a dicha sociedad y cada uno de nosotros debe contribuir a ese objetivo fundamental. Para ello no podemos regirnos por intereses mezquinos e individuales ya que iríamos en contra de nosotros mismos o lo que es lo mismo, iríamos en contra de la sociedad. Es por ello que cuando aparecen individuos que roban o asesinan son aislados de la sociedad por ir en contra de la misma. Ahora, ¿Somos consientes como individuos que formamos parte de algo más grande que nosotros mismos? o lo que es más relevante ¿Somos consientes de ser parte de una sociedad? y que cada uno de nuestros actos van en beneficio o perjuicio de la sociedad.
Ahora, por qué me estoy preguntando hoy sobre el rol de los empresarios en la sociedad se debe a una conversación de la cual fui testigo hace unos días atrás. Salió el tema de un negocio y cómo ya no seguían en él a raíz de la gran cantidad de cosas que debían de tener para cumplir con las leyes laborales, entre ellas baños, salas cunas, comedores, etc y que ello implicaba una gran cantidad de gastos y que al final ya no era rentable.
Aquí es donde quiero detenerme, el rol del empresario hoy se ve únicamente como el personaje que debe de tener dinero y hacerlo crecer, o como dicen los economistas, hacer crecer la riqueza. Eso me hizo pensar en lo siguiente, me parece que los empresarios, como parte de la sociedad y como actores que utilizan a otros miembros de la sociedad para sus propios intereses actúan de una forma egoísta. Yo no digo que todas las ganancias que obtengan sean repartidas de manera igualitaria a cada uno de los trabajadores (eso es utópico), pero, deben de estar consientes que los trabajadores merecen las mejores condiciones para poder cumplir con la parte que deben realizar y que sin los trabajadores no hay crecimiento de la riqueza. La forma de ver la economía carece de una visión social, es decir, la economía no es parte de la sociedad, sino que se aprovecha de ella para hacer crecer los indicadores económicos, el mercado.
Hoy en día la economía se ha convertido en una especie de religión, de la misma forma que el pensamiento cristiano regía la vida de las personas en la Edad Media hoy el pensamiento económico rige nuestras vidas. Si algo no esta de acuerdo con el mercado es una herejía. Nos esta ocurriendo lo mismo que le pasó a Galileo Galilei o a Giordano Bruno quienes fueron encarcelado y quemado respectivamente por pensar distinto al canon de la época. Hoy sabemos que los satélites de Júpiter existen (tal como lo dijo Galileo) y que el Sol es una estrella más dentro de miles de estrellas en nuestra galaxia (tal como dijo Bruno), así que el pensar que los empresarios deben de cumplir su rol social como miembros de la sociedad no debe de sonar tan descabellado.
Entre paréntesis, no quiero igualarme a las ideas que presentaron dos grandes pensadores de la historia, como Galileo o Giordano, pero la analogía me parece potente y útil para poder mostrar cómo es que nos ciegan los paradigmas imperantes y estamos miopes a nuevas formas de ver el mundo. Quizás, tal como los hechos mostraron que el Sol es una estrella más y que la Tierra no es el centro del Universo, la economía no debe de guiarnos a tomar decisiones que sólo posean la componente económica y que debemos de aceptar internamente todos nosotros que somos parte de algo mayor y que nos agrupamos de manera social (compañerismo) para poder dar continuidad a nuestra especie.